En esta época del año debemos tener especial cuidado con la leishmaniosis ya que, a pesar de estar activa todo el año debido al cambio climático, el periodo de más riesgo va de marzo a octubre.
En este artículo te contamos qué es la Leishmania, a quién afecta, cuáles son sus síntomas y cuál es la mejor manera de proteger a tu animal.
¿Qué es la Leishmania?
La Leishmania es una enfermedad infecciosa que se contagia principalmente a través de la picadura de un mosquito, el flebotomo. Concretamente es la hembra del mosquito la que transmite la enfermedad ya que necesita alimentarse de sangre para hacer la puesta de los huevos. Este mosquito debe haber picado previamente a un animal con Leishmania para poder transmitir la enfermedad.

Los flebotomos viven en zonas oscuras y húmedas. Durante el día se esconden en grietas y hendiduras, y cuando empieza a atardecer salen a alimentarse.
La zona del mediterraneo está considerada como zona de “riesgo muy alto” de Leishmaniosis.

También se han descrito otras vías de contagio aunque no son tan frecuentes: por mordedura, transmisión sexual, vía transplacentaria o por transfusiones de sangre.
Cuando un animal resulta contagiado de Leishmania infantum el parásito pasa al torrente sanguíneo y su sistema inmunológico empieza a reaccionar contra el parásito fabricando anticuerpos. Esta reacción del organismo es la que causará la mayoría de problemas de salud que sufrirá el animal.
¿A quién afecta la Leishmania?
Aunque la enfermedad de la Leishmania es más conocida por sus efectos en los perros, también pueden contagiarse los humanos, los hurones, los gatos y los lobos.

Varios estudios epidemiológicos han señalado que los perros de tamaño mayor son más propensos a contagiarse, así como los menores de 1 año de edad.
Tipos más frecuentes de Leishmaniosis
Principalmente hay 2 grandes tipos de Leishmania: la visceral y la cutánea.
La Leishmania visceral es la más grave ya que afecta a los órganos internos del animal que ha sido infectado, mientras que la leishmania cutánea presenta sus síntomas en la piel.
Síntomas de un perro con Leishmania
Aunque los síntomas pueden variar dependiendo del tipo de Leishmania, os explicamos los más característicos:
- Alopecia en la zona de la cara, especialmente alrededor de los ojos (son los llamados ojos de payaso), alrededor de las orejas y de la nariz.
- Heridas en la piel que suelen resistirse a cicatrizar, sobre todo en la punta de las orejas.
- Aumento del tamaño de los ganglios linfáticos.
- Sobrecrecimiento y debilidad de las uñas.
- Cojera, debido a la entrada del parásito en las articulaciones.
- Insuficiencia renal.
- Fiebre.
- Sangrado nasal.
- Anorexia y pérdida considerable de peso.
¿Cómo se diagnostica la Leishmania?
En consulta se pueden hacer varios test de diagnóstico rápido: citología y test de Leishmania.

Si cualquiera de éstas 2 pruebas indica que el animal tiene Leishmania será necesario enviar una muestra al laboratorio para determinar la gravedad de la enfermedad.
Algunos órganos (corazón, riñones) pueden estar afectados y esta información será muy importante para el veterinario a la hora de establecer un tratamiento adecuado y personalizado.
Tratamiento de la Leishmania
Como en todas las enfermedades la detección precoz de la Leishmania puede mejorar mucho el pronóstico del animal.
Con nuestros Planes de Salud de perro adulto y senior realizamos un test anual de Leishmania y otras enfermedades vectoriales que pueden llegar a ser graves si no se detectan a tiempo.
Aunque el tratamiento indicado dependerá de la gravedad de cada caso, las medicaciones más usadas para tratar la Leishmania son el alopurinol, el glucantime y el antimoniato de meglumina. La combinación de estas medicaciones y la duración de cada tratamiento se valorará en función del resultado de las analíticas que el veterinario irá haciendo periódicamente al animal infectado.
Prevención de la Leishmaniosis
Por suerte hoy en día existe un amplio abanico de productos que nos ayudan a prevenir la Leishmania.
Contamos con pipetas y collares que deberemos aplicar siguiendo las indicaciones del veterinario habitual del animal. Especialmente en épocas de calor deberemos ser muy rigurosos con la prevención de la Leishmaniosis.
También contamos con la vacuna de la Leishmaniosis que, si bien no previene del contagio, ayuda a las defensas del organismo a hacerle frente en el caso de ser picado por el mosquito.
Nuestras recomendaciones frente a la Leishmania
Cumple con rigurosidad la pauta de prevención que te indique el veterinario, especialmente en primavera y en verano.
Realiza el test una vez al año para detectar de manera temprana un posible contagio de Leishmania.
Acude a tu veterinario habitual si crees que tu perro puede haber sido contagiado.
Ponte en contacto con nosotros si tienes alguna duda sobre la Leishmaniosis o cualquier otro aspecto relacionado con la salud de tu mascota.